viernes, 29 de mayo de 2015

Vals


Fueron dos los luceros en el mismo perímetro.
Resplandeciendo como luz de vela a media noche.
De esas a las que se les susurra un deseo,
Por las que se cumplen los sueños.
 Siempre presentes,
Dos estrellas en el firmamento.
Andando de la mano alumbrando el universo.
Sollozaban los dedos encontrándose a mitad de camino.
Melodías en pausa, en silencio.
No se decían nada pero se  conocían todo.
 En un vals de no acabar.