lunes, 13 de febrero de 2017

Memorias


Recuerdo el traje. 
Me lo había comprado en una tienda de departamento por doce dólares. 
Recuerdo el coraje. 
La rabia que lo hizo partirlo en dos porque le lleve la contraria. 
Recuerdo la costurera. 
Que lo reparó sin cobrarme cuando le conté lo que ocurrió. 

<<Fue mi padre. 
No se tomó sus pastillas y regresó a casa molesto. 
Por el dinero. Por el tráfico. Por existir. 
Sabía que tenía mis ánimos de la semana en el baile. 
Le molestó mi presencia. 
Y lo destrozó. >>

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